Un embudo de decantación, ampolla de decantación, pera de decantación o embudo de separación es un elemento de vidrio de forma de pera invertida o cono invertido, que se puede encontrar en los laboratorios.

En la parte superior presenta una embocadura taponable por la que se procede a cargar su interior. En la parte inferior posee un grifo de cierre o llave de paso que permite regular o cortar el flujo de líquido a través del tubo que posee en su extremo más bajo.

Es un instrumento utilizado para separar líquidos inmisibles. Los mismos se separan por diferencia de densidades y propiedades moleculares mediante una interfase bien diferenciada.

Un ejemplo es la separación de una cierta cantidad (reducida) de una emulsión de agua y aceite. El primer paso es cargarlos en el embudo de decantación. Luego de reposar el tiempo suficiente para que aparezca una separación clara de ambas sustancias se puede dividir en dos fracciones. Para ello se abre la llave inferior y se deja escurrir el líquido más denso (en este caso el agua). Cuando se observa que la interfase de ambos líquidos va aproximándose a la válvula se corta el flujo. En este momento se logra tener el agua recogida en un recipiente y el aceite dentro del embudo de decantanción.

Otra aplicación del uso de la ampolla de decantación es la separación de diferentes pigmentos, presentes en una muestra vegetal. La manera de llevar a cabo esto es emplear solventes polares y apolares para que cada uno extraiga diferentes tipos de pigmento.

Para utilizar la ampolla de decantación es necesario ajustarla al vástago del soporte universal a través de la pinza con nuez.

La mezcla de líquidos se coloca en el interior del embudo de decantacion y un recipiente se pone debajo. El líquido con menor densidad flota en la parte superior.

Cuando se abre el grifo, el líquido con la mayor densidad comienza a fluir a través del embudo de decantacion hacia el recipiente. El grifo se cierra entonces justo antes de que el líquido con densidad más baja comience a fluir a través de él. El líquido con la densidad más baja queda en el embudo de decantación. Luego se puede drenar en un recipiente diferente para separar los dos líquidos.